El Gobierno estudia famosos casos de extinción de dominio para aplicarlos en la Argentina

El Gobierno estudia famosos casos de extinción de dominio para aplicarlos en la Argentina

La Oficina Anticorrupción tiene bajo estudio una lista de grandes casos de extinción de dominio concretados en todas partes del mundo. Son casos de emblemáticos, varios de los cuales ocurrieron bajo feroces dictadura como las del matrimonio deFerdinando e Imelda Marcos, en Filipina, o la del temido nigeriano Sani Abacha. Fortunas robadas por el libio Muhamar Qaddafi y transferencias del fraude y el lavado de activos que se hicieron bajo el particular régimen del peruano Alberto Fujimori.

Esta lista confirma, dice  la titular de la OA, Laura Alonso, a Clarin, que la extinción de bienes -aquellos que son fruto de una adquisición ilícita- es un mecanismo ejemplar para la Argentina. De ahí que la OA trabaja a todo vapor en lo que ha sido la presentación del DNU de Mauricio Macri ante el Congreso y que divide aguas entre el oficialismo y oposición.

Muahmar Qaddafi en 2004. Foto: AFP

Muahmar Qaddafi en 2004. Foto: AFP

Para la OA, más allá de los matices de los diferentes casos,  una vez que la extinción de dominio esté aprobada en la Argentina, el Estado podrá buscar en el mundo entero bienes y fondos robados en el país. Incluyendo los U$S 70 millones que se buscan actualmente en Estados Unidos y que, se afirma, pertenecen al  del ex secretario de Néstor Kirchner Daniel Muñoz en el contexto de la corrupción bajo la era K.

«La recuperación de activos en el exterior es posible con jueces, fiscales y órganos con capacidad investigativa, trabajo colectivo y que cooperen con autoridad de los países receptores de ese dinero ilícito. Los casos de éxito demuestran que la repatriación del dinero de la corrupción es posible», afirma Alonso.

La acompaña parte de su equipo que explicará uno de los puntos esenciales del nuevo proyecto. Que la extinción de dominio es una acción civil -también un juicio- que va en paralelo al proceso penal. Es decir que, el dinero o el bien que se demuestre que ha sido tomado por una persona o funcionario detenido, se le puede quitar mucho antes de que ese otro proceso penal termine. Que ese juicio civil avance en paralelo evita por ejemplo que las víctimas de ese fraude  se mueran antes de recuperarlo, es decir, permite reparar a tiempo graves daños. Por lo general son recuperados tras una negociación entre partes donde al final no llega a cubrir el total del monto que en sus orígenes fue robado, pero más de las veces la condición para repatriarlos que se impone es que sean destinados a acción social.

«Los tiempos para extinguir un dominio dependen del tipo de activo pero siempre va a ser más rápido un juicio civil contra el bien que esperar que una condena penal contra la persona quede firme», señaló Alonso.

Estos son algunos de los casos más resonantes casos de bienes extinguidos a figuras internacionales conocidas. Son grandes casos de corrupción, fraude y lavado de dinero que ha vuelto y que el gobierno siguió palmo a palmo.

U$S 321 millones recobrados entre 2014 y 2017 en un caso que afectó a toda la familia del ex dictador de Nigeria Sani Abacha (1993-1998). Los fondos robados pudieron retornar a Nigeria tras un memorándum firmado entre el gobierno de Nigeria, el Consejo Federal suizo y el Banco Mundial, y debieron ser utilizados para apoyar un programa dirigido a poblaciones pobres y vulnerables nigerianas.

US$ 143,4 millones sustraídos del robo de activos del ex dictador libio Muahmar Qaddafi y de figuras de su régimen- El acuerdo con Países Bajos, que liberó el dinero por pedido de la Organización Mundial de la Salud, y este destinó en la devastada libia a comprar insumos médicos para una parte de la población

US$ 34 millones acordados para devolución desde los Estados Unidos en bienes y fondos del fraude, corrupción y lavado de dinero cometido por Vladimiro Montesinos, el todopoderoso y sangriento ex jefe de los espías del ex presidente peruano Alberto Fujimori.

US$ 10 millones recuperados en los Estados Unidos por una asociación de víctimas de la dictadura  del matrimonio Filipino de los Marcos. Fueron repartidos entre víctimas de torturas, desapariciones y ejecuciones de su régimen, de entre 1965 y 1986. Y son sólo una parte de todo lo que se le adjudica haber robado a los temibles Marcos. Estos millones corresponde a lo que se pudo acordar por las 200 obras de arte desaparecidas tras el robo que perpetuó Imelda.

US$ 28 millones recuperados de los ilícitos cometidos por el ex presidente tunecino  Zine El Abidine Ben Ali. Fueron pedidos desde Túnez al Líbano y recuperados en 2013

U$S 20 millones es el acuerdo de fondos solicitados por la ciudad de San Pablo al Deutsche Bank, en Alemania, en el caso por el que fue enjuiciado el ex alcalde de la metrópoli brasileña Paulo Maluf.

Fuente: Clarín

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *