El experto argentino de la Clínica Mayo que revoluciona el tratamiento del reflujo con el uso de robótica

El experto argentino de la Clínica Mayo que revoluciona el tratamiento del reflujo con el uso de robótica

El médico Fernando Elli, jefe de cirugía gastroenterológica en la sede de Jacksonville del prestigioso centro de salud de EE.UU., en una entrevista con Infobae, dio detalles de las terapias para patologías de esófago. Por qué asegura que en el futuro la práctica quirúrgica “no estará hecha por cirujanos”.

Puede creerse que es de menor importancia, pero el esófago también importa para el funcionamiento del organismo humano. Es el tubo muscular que mide más de 25 centímetros de largo por el que pasan los alimentos y los líquidos. Transporta alimentos y líquidos desde la boca hasta el estómago.

El médico argentino Fernando Elli ha dedicado su carrera a desarrollar mejores técnicas para solucionar los problemas que enfrentan los pacientes con diversas patología gástricas. Ahora también le agregó el uso de la robótica.

Es investigador y jefe de cirugía gastroenterológica en la prestigiosa Clínica Mayo en la ciudad de Jacksonville, Florida, en los Estados Unidos. También trabaja como profesor de cirugía de la Escuela de Medicina Alix de la Clínica Mayo. Se formó en la universidad pública de la Argentina: hizo su residencia en el Hospital de Clínicas José de San Martín de la Universidad de Buenos Aires (UBA). La semana pasada fue expositor en el 93° Congreso Argentino de Cirugía que realizó en Buenos Aires.

Durante una entrevista exclusiva con Infobae, el doctor Elli contó cuáles son las últimas novedades en el tratamiento para patologías que afectan al esófago. Detalló lo que se sabe hasta hoy sobre la enfermedad por reflujo gastroesofágico, el esófago de Barrett y el cáncer que puede desarrollarse en el órgano sin dar síntomas en sus primeros estadíos.

El siguiente es el diálogo que el experto mantuvo con Infobae:

El cirujano argentino Fernando Elli desarrolla técnicas con ayuda de robots para tratar a pacientes con patologías del esófago en la Clínica Mayo de Estados Unidos/Clínica MayoEl cirujano argentino Fernando Elli desarrolla técnicas con ayuda de robots para tratar a pacientes con patologías del esófago en la Clínica Mayo de Estados Unidos/Clínica Mayo

– ¿Qué es lo que provoca el reflujo?

El reflujo ácido es el problema más común que puede afectar al esófago. Se produce cuando el esfínter esofágico inferior se abre cuando no debe y eso permite que el ácido estomacal y los jugos digestivos vuelvan del estómago al esófago. Puede causar inflamación y ardor de estómago.

La enfermedad por reflujo gastroesofágico es una forma más grave de reflujo ácido. El ácido estomacal vuelve al esófago de forma persistente. Algunas personas tienen ardor, tos, dolor torácico, ronquera, mal aliento o dificultad para tragar.

En el pasado, las personas iban a ver al médico para consultar cuando tenían reflujo. El profesional les indicaba el medicamento que necesitaba receta. Hoy, en cambio, las personas tienden a usar medicamentos de venta libre y no consultan a tiempo. A partir del reflujo patológico y crónico se pueden tener complicaciones que pueden dar lugar a la afección de esófago de Barrett. El revestimiento plano y rosado del esófago se daña por el reflujo ácido y se engrosa y se vuelve rojo.

La enfermedad por reflujo gastroesofágico se produce cuando el ácido del estómago fluye con frecuencia hacia el esófago (Archivo
Getty  Images)La enfermedad por reflujo gastroesofágico se produce cuando el ácido del estómago fluye con frecuencia hacia el esófago (Archivo Getty Images)

– ¿Cómo se trata hoy al reflujo?

La recomendación es que si una persona tiene reflujo crónico, debe consultar al médico. Para determinar si alguien tiene la enfermedad por reflujo gastroesofágico, se puede hacer una endoscopia superior, que permite detectar si hay inflamación y complicaciones, como el síndrome de Barrett.

Los tratamientos se indican según el estado de cada paciente. En algunos casos se necesitan medicamentos. En otros casos, se puede requerir diferentes cirugías. En la Clínica Mayo estamos estudiando el uso de técnicas no quirúrgicas para el tratamiento del reflujo que mayoritariamente son por vía endoscópica. Estamos evaluando la efectividad de ese procedimiento.

Hoy en día la cirugía es el estándar para el tratamiento del reflujo severo y crónico, especialmente si existe la presencia de una hernia hiatal.

Si el paciente sufre reflujo severo y obesidad, entonces el mejor procedimiento quirúrgico es el bypass gástrico. Es la opción que trata tanto la obesidad como el reflujo. Al hacerse esa intervención, se divide el estómago y se construye un pequeño reservorio gástrico. Así se reduce significativamente el ácido que va al esófago. También el bypass trae aparejado una importante baja de peso, que también mejora el reflujo.

El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de tener trastornos del reflujo en el esófagoEl sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de tener trastornos del reflujo en el esófago

– ¿Qué tan efectivo es el bypass gástrico?

Es importante considerar que la obesidad es un problema crónico y tanto los pacientes como el equipo de salud deben considerarlo de esa manera. Entre un 15% y 20% de los pacientes que son sometidos al bypass vuelven a ganar peso.

Tras muchos años de experiencia, se comprobó que lo fundamental para tener éxito a largo plazo es el tratamiento multidisciplinario y seguimiento sostenido del paciente. El apoyo de profesionales de nutrición, clínicos, cirujanos y psicólogos. La idea es que se prevengan o detecten los aumentos de peso no deseados y la recidiva de las enfermedades asociadas.

Además, ahora también contamos con los nuevos agentes agonistas GLP-1 que se pueden usar como tratamiento primario de la obesidad. Se pueden indicar antes o después de la cirugía bariátrica para mantener el resultado deseado. Todas las decisiones deberían hacerse bajo la supervisión del equipo multidisciplinario.

– ¿Cómo se trata al esófago de Barrett?

El tratamiento depende del grado de crecimiento celular anormal que haya en el esófago del paciente y su estado de salud general. Si no tiene displasia, se hace una endoscopía periódica y se indica tratamiento para el reflujo. En cambio, si se detecta displasia, se consideran otras intervenciones, como la resección endoscópica, la ablación por radiofrecuencia o la crioterapia.

El doctor Elli ya usa la cirugía robótica en intervenciones de pacientes con reflujo esofágico severo, esófago de Barret, el bypass gástrico o el cáncer de esófago (Clínica Mayo)El doctor Elli ya usa la cirugía robótica en intervenciones de pacientes con reflujo esofágico severo, esófago de Barret, el bypass gástrico o el cáncer de esófago (Clínica Mayo)

– ¿Cuándo se usa a la robótica?

La cirugía robótica es hoy un complejo instrumental que permite al cirujano ser más preciso y, en algunos casos, disminuir las complicaciones postoperatorias y disminuir la estadía hospitalaria. Ya hacemos con robots las intervenciones para reflujo esofágico severo, el esófago de Barret, el bypass gástrico o el cáncer de esófago.

Los tumores de esófago han aumentado en los últimos años su incidencia por el incremento de la tasa de obesidad. Se diagnosticaron en más de 600.000 personas en el mundo en 2020.

Nuestra experiencia nos demuestra que el uso de la robótica puede reducir algunas de las complicaciones postoperatorias. Puede prevenir fugas de la conexión que se realiza entre el esófago y el estómago.

– Pero aún la cirugía robótica no es de uso masivo

Sí. Pero ya hay cerca de 20 compañías en todo el mundo que producen distintos robots quirúrgicos. Eso estimulará la competencia y disminuirá el precio de los insumosLa cirugía del futuro no estará hecha por cirujanos. Va a estar supervisada por humanos. Van a ser robots que operan en base a la inteligencia artificial y la experiencia previas. Nos sacará, pero aún necesita la supervisión del humano.

La robótica y la inteligencia artificial no serán para todos los casos de cirugía. También hay que sumar que se desarrollará la medicina personalizada, con terapias genéticas.

Fuente: Infobae