Fiat 600: un icono argentino que ya tiene su primera versión 100% eléctrica
Se trata de una joya de 1969, radicada en Mendoza. Tiene una autonomía de 50 kilómetros y alcanza los 80 km/h.
El Fiat 600 fue un estandarte de la industria automotriz nacional. No solo fue el primer vehículo fabricado por la marca italiana en nuestro país, sino que desde 1960 hasta 1982 generaciones de argentinos aprendieron a manejar con él.
El Fitito fue uno de los modelos más populares. Su precio económico permitió que mucha gente pudiera cumplir el sueño de tener su primer 0 km; también fue el auto preferido de la mujer y, en sus años de gloria, uno de los preferidos del mundo del jet-set y también del cine, ya que supo ser protagonista de muchas películas argentinas.
En pocas palabras, el 600 fue un modelo que creó un lazo muy fuerte con los argentinos. Y teniendo en cuenta que se trata de un símbolo nacional, un proyecto de reciclaje de la provincia de Mendoza transformó un Fitito convencional en un Fitito eléctrico.
La compra, restauración y conversión del Fitito demandó una inversión de 15 mil dólares.
El proyecto se llama «Qnda», y está encabezado por Cristian e Ignacio Coccuci, Matias Herrera, Claudio Salinas y Gustavo Coppoletta, que pusieron en marcha este desarrollo en 2019.
Su primera obra maestra fue la transformación de un Fiat 600 E (la E no se refiere a «eléctrico», sino que corresponde a la versión original del vehículo, lanzada en nuestro país en 1965).
En este caso se trata de un modelo fabricado en 1969, al que se le retiraron todas las piezas relacionadas con el sistema de propulsión a combustión interna (motor, tanque de nafta, escape, parte de la distribución, y embrague) reemplazándolas por un motor eléctrico de origen chino y unas baterías de ciclo profundo que pueden recargarse enchufando el “Fitito” a cualquier toma corriente casero.
En una charla con Clarín, Gustavo Coppoletta, uno de los encargados del proyecto comentó que «con estas baterías de gel el Fiat 600 eléctrico tiene una autonomía entre 50 y 55 kilómetros, y alcanza una velocidad 80 km/h. Sin embargo ya hemos encargado baterías de litio, que le permitirán triplicar su alcance».
Como todo vehículo eléctrico no emite gases contaminantes ni ruidos, y su costo de mantenimiento es muy bajo. Para recargar su batería al 100% solo basta con enchufarlo durante dos horas y media.
El Fiat 600 E by Qnda demandó una inversión de 15 mil dólares y para su transformación se necesitaron unos 8 meses de trabajo, teniendo en cuenta que el vehículo tuvo que ser previamente restaurado y puesto en condiciones.
Para Qnda, el Fitito fue el punto de partida de un proyecto que intenta acercar este tipo de propulsión alternativa a particulares y empresas, colaborando con el cuidado del medio ambiente.
El Fitito eléctrico lleva un motor de 60 amperes y una batería de gel que próximamente será reemplazada por una de litio.
«A partir del Fiat 600 eléctrico hemos recibido muchas consultas de particulares para la conversión de sus vehículos, entre las cuales hubo dos referidas a otros Fiat 600. Y eso nos enorgullece», comentó Coppoletta.
Al mismo tiempo, Qnda ya avanza con otros dos proyectos de transformación: uno sobre un Hummer H1, que recibirá componentes de un minibús, y otro sobre un Mini Cooper.
«En Europa cada vez es más fuerte la conversión de autos clásicos a eléctricos (denominada «retrofit»). Nuestra idea es introducir esta modalidad ecológica en nuestro país, y que cada vez sean más lo que elijan esta alternativa amiga del medio ambiente», concluyó Coppoletta.
Fuente: Clarín
