Miguel Fortunato: «Difícilmente podamos saber la verdad real»
Miguel Fortunato, papá de Genaro, habló en Telefé Noticias con la conducción de los periodistas Cristina Pérez y Rodolfo Barili y dejó en claro que no cree en el accidente y explicó los motivos.
«Todos sabíamos que estaba con ella, en referencia a Julieta Silva, la había visto un par de veces en la cancha, supongo que mi hijo no me lo había contado porque era una mujer más grande, con hijos y a lo mejor pensó que podíamos no aceptarlo, no lo sé, pero tenía una relación con ella evidentemente».
Ante la consulta de porqué creía que esto no fue un accidente y que ella quiso matar a su hijo, Miguel sostuvo: «Hay un montón de cosas que me hacen ruido, yo no soy abogado, no sé nada de leyes, pero por ejemplo la luz que había en el lugar en el momento del accidente compaginando la luz de la luminaria pública y la luz del auto, da un valor de 200 luz, esto es densidad de iluminación y una casa tiene un valor de 100, o sea estamos hablando de un valor importante».
Además agregó «No puedo entender, no me cierra que mi hijo que tenía un porte importante haya sido arrastrado 3,5 metros sin darse cuenta, cualquiera de nosotros hemos agarrado en algún momento una rama o una bolsa de basura, el ruido y todo lo demás es suficientemente importante como para que no provoque el alerta. El auto tenía un abollón en el lado que atropelló a Genaro, lo que significa un golpe, después pasa por encima del cuerpo, estamos hablando de un obstáculo que tiene una altura de 20 o 25 centímetros».
Finalmente el papá de Genaro dijo: «Un pozo deprime la rueda no la levanta, la geometría de un pozo es diferente porque el pozo es profundo desde el centro hacia el asfalto, a 30 kilómetros casi no hay impacto. Ante la consulta sobre si alguna vez Julieta los llamó, Miguel lo negó, e incluso sostuvo que no sabía si la hubiera podido atender.
En el cierre dejó un claro mensaje: «Creo que hay tres verdades, la verdad absoluta, la verdad judicial, y la verdad real, difícilmente podamos saber la verdad real, la judicial será la que se pueda probar.»
