Plazo fijo: se viene el dato de inflación de agosto, ¿qué hará el BCRA con las tasas?

Tras la devaluación del peso que se implementó en agosto, el dólar está fijo en $350 y la inflación subió fuerte en el mes. ¿Cómo reaccionará el Banco Central en este contexto?
Plazo fijo e inflación: el objetivo de tasas positivas
En ese contexto, ¿cómo reaccionará el BCRA con su política de tasas? tal como indica Federico Zirulnik, economista jefe del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz, “si quiere seguir sosteniendo una tasa positiva, va a tener que volver a subirla”.
Para no abandonar ese sendero, teniendo en cuenta que el rendimiento efectivo mensual del plazo fijo es hoy del 9,7% contra una inflación por encima de 10%, el BCRA debería subir las tasa una vez más. Así lo ratifica el director de CyT Asesores Económicos, Camilo Tiscornia, cuando apunta que “debería ser más alta” en relación a la inflación prevista.
Sin embargo, al igual que el resto de los analistas consultados, Tiscornia considera que “es muy probable que no la suba, sobre todo, teniendo en cuenta que es una medida que agravaría el déficit cuasi fiscal (los intereses que el BCRA le paga a los bancos por las letras de liquidez).
Asimismo, Zirulnik indica que hay que tener en cuenta que, más allá del pico de agosto, como consecuencia de la devaluación y las medidas anunciadas, “es probable que, para septiembre, baje algo la inflación” respecto de la del mes previo.
Así, tal como indica Sergio Chouza, director de Consultora Sarandí, todo indica “que la actitud más prudente, hoy, sería dejar la tasa del plazo fijo estable en el 9,7% efectivo mensual, con 118% nominal anual y 209% efectivo anual, más allá del fogonazo inflacionario del mes de agosto”.
Cómo seguirá la inflación: clave para el plazo fijo
Y es que, tal como se deduce de lo señalado, ese fenómeno pareciera ser un pico de un momento, que, en palabras de Chouza, “estuvo dado por altísima volatilidad e incertidumbre por el resultado de las elecciones sin anclas institucionales y nominales y que volvió a su cauce, tras el acuerdo con el FMI”.
De hecho, destaca que, en términos nominales, la situación no se desbandó y que, después del pico de la tercera semana del mes de agosto, la primera semana de septiembre muestra una desaceleración inflacionaria respecto de la última del mes anterior.
Además, los analistas coinciden en mencionar que, en el actual contexto electoral, en el que la ida hacia el dólar ya es una tendencia muy marcada, se hace evidente la inefectividad de la tasa para desincentivar la dolarización.
Plazo fijo: qué hará el BCRA con las tasas
En consecuencia, teniendo en cuenta que, lado, tal como se dijo, es alto el costo que se paga por los intereses de la deuda del BCRA, un nuevo ajuste de tasas pareciera ser más perjudicial en este momento de lo que serviría para desincentivar una dolarización en el corto plazo.
En un sentido similar apunta el economista y director de MyR Consultores, Fabio Rodríguez, quien plantea que espera que se dé “un mini estatus quo hasta octubre por parte del Gobierno, intentando seguir con el dólar oficial en $350 y el MEP intervenido en la zona de entre $650 y $700” y señala que, mientras esto resulte efectivo para que no se disparen los tipos de cambio y el BCRA pueda seguir comprando dólares, no ve incentivo para subir la tasa.
Así las cosas, para Chouza, “lo más prudente es mantener la tasa estable en estos niveles, aún frente a un dato inflacionario alto en agosto, y no volver a darle otro push”.
Lo mismo señala Zirulnik, quien considera que “si la inflación de agosto da por debajo de 12% (variable posible, aunque parece difícil), es probable que el Central sostenga la tasa del plazo fijo en niveles actuales, en tanto que, si está por arriba de ese nivel, seguramente, vuelvan a subir”.
Fuente: Ambitofinanciero