A partir de este miércoles se espera que se aplique el quinto y último aumento de precios del año para las naftas y el gasoil, ya que el Gobierno actualizó el impuesto a los combustibles y esa variable tiene un impacto de 1% en los valores en el surtidor.
La decisión principal está concentrada en YPF, que es la empresa líder del mercado, con el abastecimiento del 55% de los despachos de nafta y gasoil.
Desde la empresa informaron que se trasladará el precio del impuesto, con lo cual el aumento será del 4,5% promedio en todo el país.
Las empresas refinadoras podrían aplicar además un aumento superior para compensar el impacto de la devaluación del peso, que desde el último alza de precios se incrementó 2,6% (el tipo de cambio mayorista pasó de $80,36 a $82,47).